Comunicado de prensa

La fiscal del distrito de Queens, Melinda Katz, anunció hoy que José Claros, de 57 años, ha sido acusado por un gran jurado del condado de Queens y fue procesado en la Corte Suprema de Queens por curso de conducta sexual contra un niño, abuso sexual y otros cargos por agredir a un estudiante de 12 años entre 2013 y 2018 en su residencia de Richmond Hill, Queens.

El fiscal Katz dijo: «Este es un caso muy inquietante. Como miembro de la Asamblea, llevé el curso de la ley de conducta sexual para asegurar que los depredadores sexuales de niños no se salgan con la suya abusando de los niños. La madre de este aspirante a jugador de fútbol permitió que su hijo se quedara a solas con el acusado creyendo que sería un mentor y ayudaría a su hijo a desarrollar su potencial atlético. En lugar de ello, el acusado supuestamente traicionó esa confianza y abusó sexualmente del niño durante años. Ahora el acusado se enfrentará a la justicia en nuestros tribunales por sus presuntos actos.»

Claros, de la calle Parklane South en Richmond Hill, Queens, fue procesado esta mañana ante la jueza interina del Tribunal Supremo de Queens Lenora Gerald por una acusación de siete cargos en la que se le imputa conducta sexual contra un menor en primer grado, abuso sexual en primer grado, acto sexual delictivo en primer grado y poner en peligro el bienestar de un menor. El juez Gerald ordenó que el acusado volviera al tribunal el 25 de marzo de 2021.

Según los cargos, durante el fin de semana del Memorial Day de 2013, la víctima jugó un torneo de fútbol fuera de casa donde conoció al acusado. Claros, que era entrenador de la Metropolitan Oval Academy, llevó a la víctima en coche hasta su casa y se ofreció a entrenar al joven de forma privada y gratuita. El acusado se reunió con la víctima aproximadamente una semana después en la casa del acusado en Richmond Hill, Queens, donde después de completar los ejercicios, el acusado supuestamente besó al niño, colocó la mano de la víctima en su pecho y pezón y recostó la cabeza de la víctima en su regazo, donde el niño pudo sentir que Claros estaba excitado.

Según los cargos, el acusado presuntamente continuó un curso de abuso sexual, incluyendo caricias y sexo oral, en la casa del acusado después de los ejercicios y entrenamientos de fútbol. La denuncia alega que esta conducta continuó hasta que la víctima tenía 17 años.

La investigación corrió a cargo del detective Christopher Delmar, de la Brigada de Víctimas Especiales de Queens del Departamento de Policía de Nueva York, bajo la supervisión del teniente Christopher Lippolis.

El fiscal adjunto George Kanellopoulos, de la Oficina de Víctimas Especiales de la Fiscalía, está llevando el caso bajo la supervisión de los fiscales adjuntos Eric C. Rosenbaum, jefe de la Oficina, Debra Lynn Pomodore y Brian Hughes, jefes adjuntos de la Oficina, y bajo la supervisión general del fiscal adjunto ejecutivo de Delitos Graves Daniel A. Saunders.

Los padres que crean que su hijo puede haber sufrido abusos sexuales deben llamar a la Brigada de Abusos Infantiles de la Policía de Nueva York al (718) 261-2737.